Ya tienes tu terreno y tu casa construida y lista para vivir pero falta una valla para proteger y ocultar su interior

Todo es perfecto hasta que descubres que tienes vecinos o que por la calle pasa gente. Para poner remedio a estas molestias, lo mejor es que recurras a las vallas de metal.

Lo malo es que todo el mundo sabe que las vallas no siempre casan con la estética de tu vivienda, ¿verdad? ¡Para nada! Esa afirmación es la propia de quienes no conocen LA VALLA ni los diferentes tipos de vallas de metal con las que contamos y de los que te hablamos en esta ocasión.

 Los mejores tipos de vallas de metal

Vallas rígidas

 Estas vallas de metal son muy duraderas y, para otorgarles un mayor valor estético, se revisten de poliéster de cualquiera de los colores RAL ¡nada menos que 213 tonos para elegir!

Presentan 2 formas diferentes de instalación, sobre el muro que cerca tu propiedad o sobre el suelo. En este último caso, la fijación se realiza atornillando o mediante pletinas encastradas.

Una de las grandes virtudes de las vallas de metal es que, además de cumplir las función de proteger tu vivienda, te permitirán conservar las vistas de los alrededores. Asimismo, son muy fáciles de montar y si es así tu deseo, encargo mediante en LA VALLA, podemos darle al entramado un diseño modular original.

Las 2 clases de vallas rígidas que existen son:

  • VallaBas. Su altura oscila entre los 100, 150 y 200 cm. En cambio, su longitud es fija, 268 cm. El diseño de las vallas de metal VallaBas es minimalista y consiste en paneles de entramados rectangulares unidos entre sí por un poste cilíndrico de igual altura que el resto de la valla.
  • VallaQuick. Las formas que presentan los entramadas de este tipo de vallas de metal son idénticas a las de las VallaBas. Eso sí, el diseño es más caprichoso, puesto que las varas de metal verticales, en lugar de estar rectas en todo momento, se doblan en 2 ocasiones. De esta manera, si pusiéramos la valla en horizontal, la forma parece querer imitar las orillas y el cauce de un río.

Vallas semi rígidas

vallas de metalSu instalación es muy similar a los modelos de vallas rígidas y su principal característica es su capacidad de modulación frente a las anteriores.

  • VallaXis. En principio, los tonos más comunes del poliéster con el que se revisten estas vallas son el verde y blanco de serie, pero siempre existe la opción de que te pongamos de alguno de los 213 colores RAL. La instalación es muy sencilla, puesto que o van encima de un muro ya existente o se fijan al suelo mediante sus propios portes. Además, presentan una particularidad muy útil, ¡se adaptan a los espacios curvos! La altura de las VallaXis puede ser de 0,63, 100, 150 o 200 cm y la longitud 248. El diseño, asimismo, resulta similar al de las VallaQuick con la diferencia de que en las VallaXis aparecen, al menos, 2 “canales de río”.
  • VallaMut. En este caso, a los tonos de serie blanco y verde se les une uno más, el gris. La instalación es idéntica que la de las vallas metálicas VallaXis y, en general, las características son muy similares. Como particularidad, las VallaMut cuentan con un diseño que facilita la fijación de elementos de ocultación sobre los paneles de las mismas.

Vallas flexibles

  • VallaFort. Son las vallas de metal más sencillas, puesto que están conformadas, únicamente, por un mallazo metálico. Vienen de serie en un único color, poliéster verde, pero, desde luego, puedes solicitar VallaFort en alguno de los 213 colores RAL. La instalación es, de nuevo, muy sencilla, sobre muros o el suelo. En este último caso, se realiza con postes verticales fijos en el firme.

Como has podido comprobar, el mundo de las vallas de metal es muy variado en diseños y, también, en colores. Por tanto, en LA VALLA, tienes a tu disposición un sinfín de posibilidades con las que aportar protección y toque estético a tu vivienda.

¡Bienvenido a la era del metal!